La titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Ana Gabriela Guevara, aseguró que México apuesta a ganar nueve medallas en los Juegos Olímpicos de París 2024, para lograr igualar la marca histórica de hace 56 años.
«No soy mediocre en apostar a los resultados; como atleta fui positiva y ahora apostamos a nueve medallas, lo histórico de México 1968», comentó en una rueda de prensa Guevara, quien es campeona mundial de 400 metros planos en París 2003 y subcampeona olímpica.
Ana Guevara recordó que México cumplió el año pasado sus mejores actuaciones en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, pero ahora llega en buenas condiciones a París 2024, con un equipo sano y bien preparado.
«La fuerza nuestra radica en las mismas disciplinas en las que hemos hecho historia siempre, pero pueden haber sorpresas que no quiero adelantar para no generar presión; están sólidos los equipos de clavados, tiro con arco, nado sincronizado, pentatlón moderno y de otros deportes», observó.
Ante los medios, Guevara recordó que en los Juegos Olímpicos se contagia el ambiente de victoria, por lo que consideró importante que México comience a ganar medallas en la primera semana para que esto influya a favor de la delegación.
De acuerdo con Guevara Espinoza, la Conade y el Comité Olímpico han establecido coincidencias luego de mucho tiempo de disputas de poder y el ambiente es bueno a tan solo una semana del inicio de los Juegos.
«El diálogo con el Comité Olímpico es terso, no hay ninguna situación que genere encono», señaló.
México ganó cuatro medallas de bronce en pasados Juegos Olímpicos de Tokio y ahora presenta una delegación de 109 competidores en donde hay una combinación de jóvenes con veteranos, algunos medallistas mundiales y olímpicos.
«Tenemos certeza de que el equipo llega con capacidad de competir; este momento va a cristalizar un antes y un después», añadió.
Finalmente la titular de Conade viajará este martes a París, la ciudad donde se hizo campeona mundial de la vuelta a la pista en el Mundial de atletismo 2003.
Fuente: López-Dóriga