Para la coordinadora parlamentaria de Morena, Fabiola Alanís, no deben ser motivo de agresión las credenciales académicas, pero señala que es importante decir la verdad
Morelia, Michoacán.- Las credenciales académicas no deben ser motivo de agresión, persecución o cuestionamiento, considera la coordinadora parlamentaria de Morena en el Congreso de Michoacán, Fabiola Alanís Sámano, quien también considera que es importante decir la verdad.
A pregunta expresa sobre la importancia de que la ciudadanía conozca sobre la formación académica de sus funcionarios, la legisladora refirió que más allá de eso, “lo que es importante es que la gente diga la verdad a todo el mundo, porque cuando alguien miente pues ya no le vas a creer nunca más, no sé, pero eso está en el sentir de cada quien”.
Desde la perspectiva de Fabiola Alanís no debía ser motivo de agresión, persecución o de cuestionamiento “de ninguna compañera sus credenciales académicas. Eso que he visto los últimos días me parece que es incorrecto, para cualquier mujer aplica o para cualquier persona”.
Cuestionada acerca de si los documentos que acreditan su formación académica son públicos, apuntó que en su caso ha sido clara, “yo tengo mucho tiempo dedicada a la formación. Yo creo que es perfectamente compatible la participación política con la formación académica”.
Refirió que es egresada de la Facultad de Economía de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, “hice la primera tesis vinculada a pobreza y economía cuando estas dos disciplinas se veían como separadas. La tesis fue sobre la pobreza en el medio urbano marginal de Morelia.
“Después estudié una maestría en Ciencia Política en la Universidad Laval de Quebec, me beco la provincia de Quebec para hacer la investigación, mi tesis para graduarme fue el papel del entonces Instituto Federal Electoral en la transición a la democracia en México”.
Agregó que posteriormente hizo un doctorado en la Universidad Autónoma Metropolitana, en la UAM-Xochimilco, “hice mi examen de grado el 13 de diciembre del 2018, me acuerdo muy bien, nunca se me va a olvidar porque fue un examen con 12 sinodales porque los grados de Doctor no son una cosa sencilla, la investigación debe ser muy rigurosa. Hice un trabajo de campo de un tema que conozco bien, es un alegato sobre cómo viven las mujeres en la zona de conflicto armado no internacional”.
