El uso de videojuegos en menores ha crecido de manera alarmante según Profeco, por lo que se sugiere limitar su uso para evitar riesgos a la salud
El uso de videojuegos móviles entre menores de 6 a 12 años creció de forma acelerada en los últimos seis años en México.
De acuerdo con la Revista del Consumidor de abril de 2025, publicada este jueves por la , en 2017 solo el 8 por ciento de los menores utilizaba estos juegos en teléfonos inteligentes, mientras que para 2023 la cifra aumentó a 40.7 por ciento, es decir, 6.1 millones de niñas y niños.
Del total de menores usuarios, el 56.4 por ciento son niños y el 43.6 por ciento niñas. Los datos provienen de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares 2023.
Profeco advierte que aunque el uso adecuado de videojuegos y aplicaciones móviles puede contribuir al aprendizaje y al desarrollo de habilidades como el razonamiento lógico o la motricidad, su uso excesivo representa riesgos reales para la salud física y mental de las infancias.
Entre los principales problemas asociados al uso intensivo de estos dispositivos se encuentran el bajo rendimiento escolar, trastornos del sueño, ansiedad, adicción digital y exposición a entornos inseguros como el acoso y la suplantación de identidad en plataformas de juego.
Además, se alerta sobre estrategias manipulativas dentro de los videojuegos que incitan a realizar compras para avanzar en los niveles, generando hábitos de consumo desde edades tempranas.
Frente a este escenario, Profeco recomienda establecer límites y horarios para el uso de pantallas, promover contenidos educativos, configurar controles parentales, y priorizar actividades alternativas como leer, hacer ejercicio o compartir en familia.
También sugiere evitar el uso de dispositivos al menos una hora antes de dormir, fomentar la privacidad de datos personales, y optar por aplicaciones aprobadas por especialistas, disponibles en tiendas oficiales como Play Store y App Store.
