Crece incertidumbre por las deportaciones masivas.
“Baby Trump”, así bautizaron a la piñata que recibió nalgadas de quienes dicen, se comporta como un niño caprichoso.
El domingo en Tijuana, Baja California, ante la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, como una forma de rechazo a sus amenazas de deportación masiva y las políticas antimigrantes que pretende impulsar, un grupo de migrantes mexicanos y activistas se manifestó en la zona de la playa, donde el muro fronterizo desemboca en el mar del océano Pacífico.
“a su actitud de niño malcriado”, “esta es una forma simbólica y pacífica de decirle a Donald Trump que no estamos de acuerdo con sus amenazas de deportaciones masivas y para pedirle que trate bien a nuestros connacionales mexicanos que radican del otro lado de la frontera, en las distintas ciudades de Estados Unidos” Sergio Tamai, director de la organización Ángeles Sin Fronteras.
José María García Lara, director de la Alianza Migrante de Tijuana, asegura que muchas de las deportaciones se harán de manera ilegal, que ademas llevaría a un conflicto mayor en la franja fronteriza.
“El sacar de manera intempestiva a los mexicanos residentes en Estados Unidos y que no están de forma regular, va a crear un gran problema porque va dejar familias separadas, va a generar mucho conflicto en la zona fronteriza mexicana y es muy probable que muchos de los que sean deportados van a intentar cruzar nuevamente, ya que sus familiares van a quedar allá”, expresó.
Agregó, “desde México les pedimos que sean muy cuidadosos con todo lo que se viene, porque será muy fuerte, nosotros lamentamos mucho la situación que está generando este nuevo gobierno que va a entrar, pero solo eso, que se cuiden mucho”.
Fuente: ARISTEGUI NOTICIAS