Hablar del deseo entre mujeres en la literatura no siempre significa hablar de grandes historias de amor
Yazmin Espinoza, colaboradora La Voz de Michoacán
“¿Qué hacer con la certeza de que la mirada del otro dice lo mismo que la nuestra, que es posible por un momento amarse con alguien, que es posible salvarse, que la felicidad existe?”
Camila Sosa Villada, Las malas
Hablar del deseo entre mujeres en la literatura no siempre significa hablar de grandes historias de amor. A veces está en un gesto, una tensión, una escena que incomoda o enternece. Este deseo, que por mucho tiempo fue censurado, silenciado o disfrazado, hoy encuentra otras formas de ser narrado: desde la amistad, la rabia, el cuerpo o el juego.
En esta selección busqué reunir a autoras latinoamericanas que escriben sobre el deseo entre mujeres de maneras muy distintas: con humor, con crudeza, con libertad o con miedo. Sus libros no siguen una fórmula, pero sí abren preguntas: ¿cómo se siente el deseo cuando no tiene nombre? ¿Cómo se narra lo que no siempre se puede decir?
Camila Sosa Villada
En Las malas, Camila cuenta su historia y la de sus hermanas travestis en Córdoba. Habla del trabajo sexual, de la pobreza, del desamparo. Pero también habla del deseo como un lugar de complicidad, como una forma de cuidar, de sobrevivir, de contarse cuentos para no caer. Su escritura no busca complacer: está llena de rabia, de belleza, de imágenes que se quedan pegadas a la piel. En sus palabras, el deseo entre mujeres es visceral, político y profundamente humano.
Andrea Abreu
Panza de burro es una novela sobre dos niñas en un pueblo de las Islas Canarias. No es una historia de amor, al menos no como solemos imaginarlo. Es una historia de deseo que no sabe aún cómo nombrarse, que aparece entre los celos, la admiración y los juegos. La narradora quiere estar con su amiga todo el tiempo, quiere ser como ella, quiere tocarla sin saber por qué. El lenguaje es áspero, lleno de oralidad, de palabras que huelen a tierra y a sol. Ahí también hay deseo, aunque no se diga.
Gabriela Wiener
Gabriela no es una narradora que se guarde nada. En libros como Sexografías o Huaco retrato, el deseo aparece como campo de exploración, de escritura y de conflicto. Habla de relaciones abiertas, de celos, de maternidad, de amor entre mujeres y de todas las contradicciones que eso implica. Su mirada no busca moralizar: solo observa, se expone, y nos invita a habitar los límites de lo íntimo con valentía.
Mónica Ojeda
En Mandíbula, Ojeda lleva el deseo al borde del horror. Su novela es una exploración de la adolescencia femenina, el miedo, el poder, el cuerpo. Las protagonistas son chicas que se desean, se imitan, se lastiman, se adoran. La sexualidad está presente, pero no como algo definido, sino como una tensión que lo recorre todo. El lenguaje de Ojeda es lírico, denso, oscuro. El deseo se vuelve paisaje, amenaza, pulsión.
Rosamaría Roffiel
Su novela Amora (1989) es un hito en la literatura lésbica latinoamericana. La novela narra la historia de amor entre dos mujeres y aborda temas como la amistad, la pasión y la construcción de la identidad femenina.
Samanta Schweblin
Escritora argentina que ha incursionado en la narrativa de ciencia ficción y lo fantástico, Schweblin ha explorado en su obra la complejidad de las relaciones humanas, incluyendo las relaciones entre mujeres, desde una perspectiva contemporánea.
Estas autoras no escriben panfletos ni manifiestos, sino historias llenas de matices. Algunas hablan del deseo de forma directa; otras lo dejan entre líneas. Lo importante es que están ahí, escribiendo desde lugares donde el deseo entre mujeres no es un secreto ni un escándalo, sino parte de la vida, de lo cotidiano y de lo posible.
Leerlas es también una forma de ver cómo ha cambiado, y sigue cambiando, la manera en que hablamos de deseo, amor y libertad. Y sobre todo, es una invitación a leer con curiosidad, con el cuerpo, y con ganas de ver el mundo desde otras perspectivas.
Yazmin Espinoza es comunicóloga enamorada del mundo del marketing y la publicidad. Apasionada de la literatura y el cine, escritora aficionada y periodista de corazón. Mamá primeriza. Lectora en búsqueda de grandes historias.
Instagram: @historiasparamama