Morelia, Michoacán

Muchos los ven como un juguete; para otros, se trata de diversión a bajo coste económico; algunos más lo ven como una suerte de tradición, pero el uso de pirotecnia es un riesgo para personas y animales, especialmente los que enfrentan condición de calle.

Cada Navidad, cada Año Nuevo, decenas de incidentes son reportados, relacionados con el manejo de pirotecnia, y los más afectados son niños, adultos mayores, personas con alguna discapacidad y animales, sobre todo, los que no se encuentran bajo la tenencia responsable de alguna persona.

Lesiones como quemaduras y amputaciones, hasta la pérdida de la vida, sin contar con daños materiales, derivados de incendios y explosiones, son consecuencias graves del uso de pirotecnia, refirió Paula Espinosa, integrante de la organización Hermano Animal.

Y es que “a la sociedad le falta concientización sobre el alcance del perjuicio que pueden causar los artefactos explosivos con base de pólvora”, afirmó Paula Espinosa, ya que se usan como juguete y se dejan en manos de personas que no están capacitadas para su manejo.

Más aún, esa falta de sensibilización se suma a la ausencia de concientización sobre los derechos de los animales, para dar lugar a incidentes como el registrado en Jacona, donde una adolescente de 15 años presuntamente habría ocasionado el deceso de un perrito, mientras jugaba con pirotecnia.

Si bien la información inicial, procedente de la Fiscalía General del Estado (FGE), no descarta un accidente, para animalistas en la zona el hecho fue deliberado, con plena intención de causar la muerte del perrito, en situación de calle, expuso.

Paula Espinoza lamentó que la legislación sobre maltrato animal no sea lo suficientemente sólida, ya que el delito de maltrato y crueldad contra los animales no es considerado como grave.

Pero, además, las autoridades no siempre atienden estos casos con la celeridad que exigen, lo que lleva a que, por ejemplo, los animalitos víctimas deban esperar incluso horas para que arriben las autoridades y constaten los hechos, lo que compromete sus posibilidades de recuperación o propicia su fallecimiento.

“Hacemos un llamado muy respetuoso al Congreso del Estado para que revise la legislación en materia de bienestar animal, para garantizar que los responsables de maltrato abandono o crueldad en contra de los animales, aún los menores de edad, sean procesados con severidad, ya que muchos criminales se inician haciendo daño a sus mascotas para después atentar contra otras personas”.

“También hacemos un llamado a las instancias públicas para que lleven a cabo los procedimientos pertinentes para garantizar la justicia en estos casos y la atención a los animales víctimas, a fin de que estos se puedan recuperar. Y finalmente pedimos a las familias que se sensibilicen sobre la necesidad de salvaguardar el bienestar de los animales, al ser estos sujetos de derecho y seres sintientes”, expresó Paula Espinosa.

Aunque los casos más graves llevan a la muerte o lesiones que ponen en riesgo la vida de las mascotas, el uso de pirotecnia ocasiona efectos múltiples sobre perros y gatos.

Estos comprenden el estrés por el ruido, al que los ejemplares son más sensibles que las personas, lo que obliga a la medicación o favorece su huída y pérdida.

“Todos los años tenemos casos de perros y gatos perdidos, que escaparon de sus hogares alterados por la pirotecnia. Yo tengo animales que debo educar para que sobrelleven estas fechas, porque se alteran mucho por el ruido”, precisó.

Cabe recordar que la FGE conoció de un perrito que murió como consecuencia de las heridas ocasionadas por la explosión de un barrenito, durante la celebración de la Navidad, en la colonia Ignacio Zaragoza, en Jacona.

Ante la Fiscalía Regional se presentaron la adolescente y su el padre; la investigación será canalizada a la Fiscalía Especializada en Justicia Penal para Adolescentes.