Cientos de personas marcharon para exigir justicia por dos niños que fueron asesinados junto a su padre por un grupo armado.
Antonio y sus hijos Alexander, de 9 años, y Gael, de 12, fueron asesinados en medio de un disputa entre dos facciones del Cártel de Sinaloa.
Con la consigna “los niños no se tocan”, los ciudadanos de Culiacán, Sinaloa, marcharon para exigir justicia por el asesinato de los niños.
La manifestación partió desde la Escuela Primaria “Sócrates” a la cual asistían los niños y llegaron hasta el Ayuntamiento de Culiacán e ingresaron a la fuerza para intentar confrontar al gobernador Rubén Rocha Moya.
Las oficinas donde despacha el mandatario fueron destruidas después de que la protesta lograra rebasar la seguridad del recinto. Rocha no dio la cara.
El caso ha provocado indignación en las últimas horas en Culiacán; cabe mencionar que desde hace cuatro meses se han registrado cientos de homicidios por la guerra entre los hijos de Joaquín Guzmán Loera e Ismael Zambada García.