La mantuvieron 4 años en la morgue mientras su madre la buscaba incansablemente.
Tras confirmarse que los restos de Francisca Mariner permanecieron sin identificar durante casi cuatro años y medio en el Servicio Médico Forense (Semefo) de Cancún, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo ha iniciado una carpeta de investigación contra exfuncionarios de la dependencia. Estos podrían enfrentar cargos por negligencia u omisión en los procedimientos de identificación genética.
La joven de 17 años, víctima de feminicidio, fue hallada el 21 de julio de 2020 en un área verde de la supermanzana 105 de Cancún, un mes después de haber sido reportada como desaparecida. La causa de muerte fue traumatismo craneoencefálico por proyectil de arma de fuego. Sin embargo, su cuerpo no fue identificado hasta noviembre de 2024 debido a fallos en las confrontas genéticas realizadas en años anteriores.
Según la FGE, el primer análisis genético se realizó en enero de 2022 con una muestra de sangre de la madre de Francisca, pero los resultados fueron negativos. Un segundo análisis en marzo de ese mismo año, utilizando un perfil genético más completo, también descartó la relación por maternidad. Posteriormente, en 2023, se repitió el examen obteniendo nuevamente resultados negativos.
La Fiscalía explicó que en las confrontas realizadas con la madre de la víctima, tres de los 24 indicadores genéticos no coincidieron, lo que llevó a descartar la relación biológica. Finalmente, en noviembre de 2024, un nuevo análisis con una muestra genética de la hija de Francisca arrojó coincidencia, confirmando su identidad.
La situación evidencia graves fallas en los procesos de identificación forense en administraciones pasadas, que retrasaron el hallazgo del cuerpo y prolongaron la incertidumbre de la familia. La Fiscalía se comprometió a investigar a los responsables y mejorar los protocolos para evitar que situaciones similares se repitan.
El caso de Francisca Mariner resalta las deficiencias en el manejo de los casos de feminicidios en México y la urgencia de garantizar justicia y dignidad para las víctimas y sus familias.
Fuente: HERALDO