La presidenta cuestionó la decisión de Google, que explicó este martes en la red social X que renombró al Golfo en sus mapas para Estados Unidos con el argumento de que es el actual nombre oficial de esa zona en ese país.

Omar Cuiriz / La Voz de Michoacán

Ciudad de México.- Este jueves la presidenta Claudia Sheinbaum leyó ante medios de comunicación la carta que su gobierno envió a Google, luego de que su plataforma de mapas aceptara renombrar el Golfo de México como 'Golfo de América' por la orden del mandatario Donald Trump de rebautizar el cuerpo de agua.

La carta inicia reconociendo que la plataforma de Google Maps tiene una alta relevancia “a nivel global y debido a que lo que se muestra en sus mapas puede influir en la comunicación internacional, por lo que el Gobierno de mexicano”argumenta su postura.

La presidenta leyó algunos puntos de la carta, entre lo que destacó que “la denominación de la zona geográfica conocida como Golfo de México tiene un origen histórico ampliamente documentado, siendo reconocida desde principios del siglo XVII en diversos mapas de carácter internacional. Este nombre es producto de un proceso de construcción geográfica y política que ha sido aceptado y utilizado por la comunidad internacional, incluidos Estados Unidos de América desde su independencia en 1776 hasta la fecha en forma ininterrumpida”.

“La denominación “Golfo de México” no obedece a una imposición de una fuente gubernamental única, como erróneamente sugiere Google, sino que es una denominación aceptada y registrada históricamente, lo cual además de construir una costumbre internacional se encuentra legalmente en los índices de la Organización Hidrológica Internacional (OHI)”.

Sheinbaum Pardo destacó que el 20 de enero de 2025, el presidente Donald Trump firmó una Orden Ejecutiva que tiene efecto exclusivamente dentro de su país, estableciendo un cambio de denominación para una fracción de Golfo de México, concretamente en lo que respecta a la plataforma continental de los Estados Unidos:

“La citada orden ejecutiva aclara que el cambio de nombre se refiere exclusivamente a una porción delimitada de dicho golfo y uno tiene efectos sobre la totalidad de la cuenca hídrica ni sobre las zonas marinas de México y Cuba. En este contexto, el cambio se limita estrictamente a las aguas bajo jurisdicción estadounidense y no extiende su aplicabilidad a ninguna otra área geográfica o política, tal y como lo indica el texto de la orden ejecutiva”.

La presidenta destacó que existen zonas marinas que se encuentran bajo la soberanía plena de los estados, solamente una zona una parte de la zona marina, las cuales son las aguas interiores y mar territorial, el cual se extiende a un máximo s de 12 millas náuticas, y señaló que si un país quiere cambiar la denominación de algo en el mar solamente sería para las 22 millas náuticas, no puede ser para el resto del Golfo de México.

“Por lo anterior, resulta imprescindible hacer de su conocimiento, que tomando en consideración que el Golfo de México abarca zonas marinas de tres países y no únicamente en los EUA, sino México y Cuba el caso solo podría corresponder a las doce millas náuticas a partir de las líneas de costa de EUA”.