Lo que parecía una inspección rutinaria terminó por destapar un caso que ha causado conmoción en Cuautitlán Izcalli. Vecinos de la colonia El Tical denunciaron a la policía un fuerte olor que provenía de una camioneta estacionada en la vía pública.
Al revisar el vehículo, oficiales de seguridad pública encontraron varias bolsas negras que contenían restos de perros en avanzado estado de descomposición. La escena provocó alarma entre los residentes, quienes de inmediato exigieron la intervención de las autoridades.
Dos hombres, identificados únicamente como Daniel Iván “N” e Israel “N”, fueron detenidos en el lugar y trasladados al Ministerio Público; según sus primeras declaraciones, los cuerpos eran de caninos que habían muerto previamente y que ellos pretendían sepultar en otra zona “para evitar molestias” a los vecinos.
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Sin embargo, la versión no convenció a la comunidad ni a las autoridades, por lo que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) abrió una investigación bajo el delito de maltrato animal.
Los restos fueron asegurados y puestos a disposición de un equipo de veterinaria forense, que deberá determinar la causa de muerte de los animales. En paralelo, la Unidad de Atención y Bienestar Animal de Izcalli prepara la cremación de los cuerpos, una vez que se concluya con el peritaje.
Este hallazgo ha generado indignación en redes sociales, donde activistas y asociaciones de protección animal han pedido que el caso no quede impune y que se refuercen las sanciones contra quienes atenten contra la vida y dignidad de los animales.
Fuente: Milenio
